Cuando era niño comencé a tener visiones que realmente sucedieron en el futuro. También sentí la presencia de seres sobrenaturales comunicándose conmigo.

Lo más bonito para mí, pero hasta el día de hoy, son las melodías musicales que surgen en mí y conectan con el universo como en un canal. Debido a estas presencias espirituales y musicales, nunca me sentí solo cuando era niño.

Por supuesto, a una edad temprana me sentí abrumado por estas presencias y tenía miedo, pero gracias a mi madre, que siempre me guió y apoyó, poco a poco fui conociendo cada vez mejor a mí mismo y a mi disposición espiritual.

A lo largo de mi vida, he buscado maestros y maestros espirituales para estudiar y examinar el mundo espiritual. Aprendí de chamanes, tarotistas, curanderos naturales, maestros en meditación budista y traté con una variedad de culturas en esta área.

En relación con estos estudios, viajé regularmente a Cuba, República Dominicana y Brasil durante más de 20 años. A través de mis estudios, me he dado cuenta de que los orígenes de las tradiciones africanas en América Latina se encuentran en África. Por eso, en 2006 viajé a Nigeria, África, para explorar las raíces de estas tradiciones.

Posteriormente publiqué un libro titulado “Ordun” sobre los orígenes de estas tradiciones, que fueron llevadas por los esclavos africanos al Nuevo Mundo en América Latina, y grabé este viaje de investigación en una película documental.

Actualmente estoy trabajando en la realización de otro documental «El despertar» en el que dejaré constancia de mis 12 años de experiencia con las enseñanzas budistas y mi desarrollo al respecto.

En 2019 me fui a Srilanka para sumergirme en el budismo vivido auténticamente y experimentarlo de cerca.

Durante unos 12 años he estado buscando mis raíces espirituales y he entrado en contacto con varios pueblos indígenas y sus chamanes en Colombia. En esta búsqueda, viajé al Amazonas en 2019 y senté las bases para otra película documental «The Call of the Yajee».